aturdido despertar

abigail desperto en una sala de reposo. al no tener ventanas al exterior era imposible deducir que hora era. estaba totalmente sola en una habitacion donde solo estaba la cama y una puerta.

Lo primero que sentí al levantarme fue un gran y fuerte dolor muscular –haa… dios mio…- dije en voz baja mientras me sentaba en la cama en donde me encontraba, observe a mi alrededor, no había ni una sola ventana, el cuarto se podría decir que estaba prácticamente vacío, solo me encontraba yo y la cama en donde estaba acostada, no traía mi celular con migo así que no había manera de verificar la hora que era.

-donde estoy…- dije un poco preocupada mientras veía mi alrededor

nada ocurrio.

Me puse de pie y me dirigí a la puerta, puse mi mano en la perilla para así darle la vuelta y salir de aquí.

la puerta estaba cerrada por el otro lado.

Trate de forcejear un poco pero era imposible abrirle – HOLA!!! HAY ALGUIEN!!- grite fuerte mientras golpeaba la puerta , en estos momentos sentía que lo mas indicado hubiera sido seguir los consejos de Daniel –alguien puede escucharme!!- grite nuevamente ya que estaba esperando alguna explicación o mínimo ver la cara o oír a alguien, no entendía porque me tenían encerrada, no había echo nada mas que tratar de cumplir mi trabajo.

"ya calmate" -se escucho una llave y se abrio la puerta-.

era un doctor de aproximadamente 25-28 años. detras de el entro una doctora de edad similar.

"¿que crees que decidan?" -pregunto nerviosa la muchacha a su colega-.

"creo que" -el doctor comenzo a hacer un examen de rutina a abigail- "nos mandaran a otra central".

"te imaginas nos envian al bajo mundo" -comento aun mas nerviosa la chica-.

"ilse, no comentes eso frente a nuestra paciente" -le hizo callar y luego miro a abigail con una sonrisa- "bien, estas sana. ve a la sala de espera y quedate alli hasta nuevo aviso".

“bajo mundo” pensé mientras me dirigía a el área en donde me habían informado, la platica que habían tenido esas dos personas era simple y sencillamente extraña, y mas porque era algo que al parecer no debí escuchar, llegue a la sala que me indicaron y tome asiento.

Actualmente me encontraba preocupada por Kyrie, que era lo que querían, que hacia exactamente esta empresa, y que era el bajo mundo, solo me quede callada, ahora mi humor no era el mismo de siempre me encontraba mas tranquila, tal vez por todas aquellas preguntas que me hacia a mi misma en mi cabeza.

casi media hora despues, aparecio un tipo vestido formalmente.

"adnade, deme un informe oral sobre lo ocurrido en la sala de descanso de kyrie" -ordenó-.

-Me puse de pie de inmediato si por supuesto!- dije mientras me ponía de pie – la señorita Kyrie y yo nos encontrábamos en la habitación, planeaba ponerle un simple ejercicio cuando aparecieron dos personas un hombre y una mujer, la mujer tiene una agilidad sorprendente, y tomo a la señorita Kyrie, trate de recuperarla pero no lo logre, trate de seguir a la mujer pero aquel hombre me detuvo, pensé que si no lograba alcanzar a la muchacha su compañero debía saber a donde se llevarían a Kyrie y así le recuperaría…-

Dije en un tono triste –llegaron aquellos policías me noquearon y es todo lo que recuerdo…- dije en voz baja mientras juntaba mis manos y miraba a el rostro a aquella persona.

"bien, retirare a tu hogar y te llamaremos para cuando regreses" -se alejo y subio al ascensor-.

Le mire frustrada – haa no entiendo que es lo que pasa…- dije completamente confundida, no entendía nada y nadie me quería dar una explicación y eso me frustraba demasiado, no savia a quien a acudir pues presentía que nadie me daría explicaciones de nada y eso me molestaba mas. Aquel hombre ya se había marchado y no había forma de preguntarle algo, suspire hondo y empecé a dirigirme a la salida, de alguna u otra forma debía encontrar una explicación.